Friday, May 30, 2008

Arena en los zapatos

Se escapan volando, una a una, las mariposas que se habían anidado en mi cuerpo este último año. Te echo de menos, a todas horas, cada minuto pesa y el tiempo se desliza demasiado lentamente. Yo quiero que el tiempo vuele, que se me vaya de una vez este dolor y se me olvide todo. ¡Pero no! No quiero olvidarte. No quiero olvidar todas las noches que pasaste acariciando cada milímetro de mi piel, las noches en las que al mismo tiempo que desordenabas mis sábanas desordenabas mi vida y la volvías de arriba abajo. No quiero olvidar como suspiraba (y suspiro) por tener tus labios junto a mí otra vez, por las miradas que posabas sobre mí al despertar. No, no quiero olvidar ni si quiera un instante. Quisiera que no doliese tanto. Quisiera tener algo más que tu voz disfrazada al otro lado del teléfono. Quisiera ser capaz de dibujar los mapas del mundo y borrar los océanos. Quisiera poder dormir una vez, no, mil veces más contigo. Quisiera poder sentir tu respiración sobre mi pelo. Quisiera poder mirarte a los ojos y saber que es verdad que al final acabaré por no echarte en falta y que llegará el día en que tú tampoco añorarás mi presencia sobre tu almohada. Quisiera… poder estar donde tú estás, ir contigo a cualquier lugar, no temer a que se me acaben los días. Quisiera poder llenar de arena mis zapatos otra vez.

Monday, May 26, 2008

Home

Home is not home anymore. Home is far away from home. Home is where your eyes lead me. Home is where your hands take me. Home is where I have been living lately. Home is where I want to be.